Los individuos que suscribimos esta declaración deseamos dejar constancia
para el futuro de los principios que nos mueven a tratar activamente de sentar
las bases para la constitución de un movimiento realmente sólido y eficaz en
contra del sistema tecnoindustrial.
1.
Nuestros Principios.[i]
Los principios que guían nuestra actividad son:
1.1 Autonomía de lo Salvaje. Entendemos por “lo
Salvaje” (también “Naturaleza salvaje”) todo aquello que no es artificial y
cuyo funcionamiento es autónomo. Lo Salvaje es la parte de la Naturaleza que es
indómita, que no está sometida al control y la gestión por parte de los seres
humanos (o de sistemas tecnológicos fabricados por ellos), aun cuando los seres
humanos puedan formar parte de ella. Consideramos también, por tanto, como
parte de lo Salvaje la propia naturaleza humana, es decir, la parte de la mente
y el comportamiento humanos que es innata y consecuencia biológica de la
evolución por selección natural. A la autonomía de esta parte salvaje de los
seres humanos es a lo que nosotros denominamos “libertad”. Nuestra postura es
que la autonomía de lo Salvaje es el valor más importante al que todos los
demás valores quedan subordinados. Consideramos malo (merecedor de nuestro
rechazo) todo lo que atenta contra la autonomía de la Naturaleza salvaje. En
consecuencia, este valor es el principio fundamental del que deriva el resto de
nuestra ideología y que inspira nuestros objetivos y nuestra actividad.
1.2 Rechazo de la sociedad tecnoindustrial y de la
civilización. Siendo nuestro principio fundamental el respeto hacia la
autonomía de la Naturaleza salvaje, consideramos malo todo sistema social que
atente de forma inevitable contra dicha autonomía. Consideramos que, por lo
menos, toda forma de sociedad civilizada (es decir, con ciudades) es
esencialmente contraria a dicho principio y, por tanto, mala. Y, dentro de las
distintas formas de sociedades civilizadas, consideramos la sociedad
tecnoindustrial (el sistema social cuya tecnología se basa en el motor de
explosión y la energía eléctrica) especialmente dañina para la autonomía de lo
Salvaje, debido a que gracias al enorme desarrollo de su tecnología afecta a
muchos aspectos del funcionamiento de la Naturaleza salvaje que antes de esta
forma de sociedad permanecían indómitos, además de interferir en mayor grado en
la autonomía de aquellos aspectos de lo Salvaje cuyas dinámicas ya se hallaban
sometidas en menor medida en otras formas de sociedad previas.
2.
Nuestro Ideal.
Creemos además que es necesario y útil un ideal
social positivo de referencia que inspire nuestra lucha. La mayoría de la gente
prefiere luchar por un ideal positivo a sólo combatir unos hechos negativos.
Nuestro ideal es el modo de vida cazador-recolector nómada, ya que es la forma
de sociedad humana existente menos dañina para la Naturaleza salvaje y que
mejor se ajusta a nuestra naturaleza.
3.
Nuestro Objetivo.
De todos modos, no creemos que pueda lograrse la
implantación consciente y planeada de un modelo social ideal sin que dicho
modelo se pervierta y/o aparezcan graves efectos negativos no previstos, y esto
sería especialmente cierto en el caso del modo de vida cazador-recolector
nómada. Por tanto, aunque consideramos deseable la desaparición de toda forma
de sociedad civilizada e incluso de toda forma de sociedad que se aparte del
modo de vida cazador-recolector nómada, no se nos ocurre ninguna vía práctica
mediante la cual dichos fines puedan ser alcanzados.
Sin embargo, de los principios señalados se
desprende un fin claro: la destrucción completa del sistema tecnoindustrial. Si
la sociedad tecnoindustrial es la forma de sociedad que más atenta contra la
autonomía de lo Salvaje, dicha sociedad debe desaparecer. Por tanto, un
movimiento que se base en los anteriores principios debe tener como objetivo
fundamental acabar con la sociedad tecnoindustrial.
Al contrario que el final de la civilización o de
toda otra forma de sociedad preindustrial diferente de las
cazadoras-recolectoras nómadas, creemos que el objetivo de la desaparición
definitiva de la sociedad tecnoindustrial puede ser alcanzable si en un futuro
se producen ciertas condiciones materiales (una gran crisis, es decir, un
fuerte debilitamiento del sistema social tecnoindustrial). De hecho, creemos
que es probable que dichas condiciones materiales se acaben dando por sí
mismas.
4.
Nuestra Labor.
La labor del movimiento debe ser:
4.1 Desarrollar y difundir una ideología basada en
los principios y el fin señalados.
4.2 Agrupar y organizar a todos los individuos
adecuados (ver punto 5) de modo que el movimiento pueda fortalecerse y
prepararse para, llegada la crisis del sistema tecnoindustrial, tratar de
echarlo abajo definitivamente.
4.3 Facilitar la llegada de la crisis del sistema
tecnoindustrial, en la medida de lo posible.
5.
Peligros a evitar.
Para que el movimiento resulte realmente eficaz y
mantenga la fidelidad a sus principios y a su fin, es imprescindible tener
siempre bien presente que todo sistema social genera una ideología (un conjunto
más o menos coherente de ideas y valores) que justifica y favorece su
mantenimiento y su desarrollo material. Por tanto, hay que tener en cuenta que
no se puede combatir eficazmente la sociedad tecnoindustrial basándose en los
valores y fines del propio sistema social que se pretende destruir. En este
sentido, es muy importante rechazar el progresismo, el humanismo y el
izquierdismo. He aquí una breve explicación de cada uno de ellos:
5.1 De entre las diversas ideas que forman parte
fundamental de la ideología de la sociedad industrial, el progreso (la idea de
que el desarrollo de la sociedad es indiscutiblemente bueno) es una de las más
importantes. El progreso implica asumir que todo cambio a mayor complejidad y
tamaño sociales supone en el fondo una mejora de los seres humanos, de la
sociedad e incluso del mundo. El progreso supone que el paulatino desarrollo de
las sociedades humanas hacia una cada vez mayor destrucción y sometimiento de
la Naturaleza salvaje es algo bueno. Justo lo contrario a como nosotros
valoramos dicho proceso. El progresismo es la actitud de asumir y defender el
progreso.
5.2 El humanismo es un conjunto de ideas que exalta
“lo humano” considerándolo superior y ajeno a la Naturaleza. El humanismo
deforma o incluso desprecia la noción de naturaleza humana (aparte de la
Naturaleza salvaje en general), generando una imagen distorsionada de nuestra
especie al considerar “humana” (o sea digna de respeto, buena) sólo la parte de
los rasgos, actos y productos de los seres humanos que, no por casualidad,
mejor se ajusta a las exigencias de la vida social civilizada. El humanismo
considera “inhumanos” (malos y despreciables) aquellos rasgos, actos y
productos de los seres humanos que no se ajustan a las exigencias de la vida
social civilizada. El humanismo es, por tanto, contrario a cualquier ideología
que tome lo Salvaje como valor fundamental.
5.3 El izquierdismo es una corriente derivada del
humanismo que lo ajusta a las exigencias de la sociedad industrial moderna. Los
rasgos básicos del izquierdismo son la defensa de la igualdad, de la
solidaridad más allá del grupo natural de allegados y de una sociedad ideal
armoniosa (sin conflictos, sin problemas). El izquierdismo es, si cabe, la más
peligrosa de las tres tendencias aquí señaladas, ya que además de justificar el
sistema tecnoindustrial al defender en el fondo ideas y valores del propio
sistema, sirve de mecanismo de autodefensa del mismo debido a su carácter
pseudorrebelde. La apariencia rebelde de las luchas izquierdistas atrae a
muchas personas descontentas con la sociedad tecnoindustrial y encauza así su
descontento al ofrecerles una forma de desfogarlo de modo inofensivo o incluso
útil para el propio sistema tecnoindustrial. Y viceversa, las personas afines
al izquierdismo, a menudo se sienten atraídas por las corrientes y movimientos
que les parecen rebeldes, absorbiéndolos, invadiéndolos y arruinándolos al
sustituir, modificar o pervertir sus principios y fines para ajustarlos a su
credo izquierdista.
Es por esto que un movimiento contrario al sistema
tecnoindustrial que desee ser realmente eficaz debe poner especial atención en
mantenerse alejado de toda forma de izquierdismo, manifestar clara e
inequívocamente su desprecio por él y mantener alejados de sí a los
izquierdistas y otras gentes igualmente indeseables (individuos poco prácticos,
inútiles, irracionales, desequilibrados, etc.).
El rechazo hacia toda forma de progresismo,
humanismo e izquierdismo, el ataque a los valores del sistema tecnoindustrial y
la difusión de nuestras ideas son requisitos para lograr que la actividad de
nuestro movimiento resulte realmente eficaz, pero es necesario recordar siempre
que no es el objetivo de dicha actividad. El objetivo es, y debe ser siempre,
acabar con el sistema tecnoindustrial, que no es única ni principalmente un
sistema ideológico, sino fundamentalmente material. No se trata de sustituir la
ideología del Sistema por la nuestra, sino de acabar físicamente con él.
Notas:
[i] Extraído de, Naturaleza Indómita. También puede leerse en: http://www.naturalezaindomita.com/ Nota de Anónimos con Cautela.
[i] Extraído de, Naturaleza Indómita. También puede leerse en: http://www.naturalezaindomita.com/ Nota de Anónimos con Cautela.